La cantante de 32 años habló sobre su experiencia con la comunidad LGBT+ durante el discurso que dio en la gala de Human Rights Campaign (Campaña por los Derechos Humanos), celebrada el sábado 18 de marzo (2017), en Los Angeles.

Seguramente si les pregunto que piensen rápido en una canción de Katy Perry lo primero que les vendrá a la mente, casi de forma involuntaria, será esto:

El tema del disco One of the Boys, de 2008, le abrió las puertas a Perry para pasar de ser una cantante pop más, a una estrella. Luego vino Hot N Cold y el resto es historia.

¿Ícono gay?

(Vía doubleperry.tumblr.com)

Así fue como Katy Perry se convirtió no sólo en una diva, sino en un ícono de la comunidad LGBT+, por alguna razón, porque tampoco es que la chica sea precisamente un modelo ejemplar.

No me malinterpreten, no es que tenga yo nada contra ella. Pero Perry está lejos de ser la mejor opción entre los muchos famosos que pudieran ser abogados de nuestros derechos.

Y no, no es porque no sea parte de la comunidad. Al menos no oficialmente. Si no porque muchas veces sus comentarios y actitudes chocan con la realidad.

Un poco de historia

No todo el mundo sabe que Katy Perry comenzó siendo una chica cristiana, de esas que hacían rock en nombre del señor.

¿Qué cambió? Según el reciente discurso de Perry, hablando del popular tema (I Kissed a Girl), la cantante exclamó: «A decir verdad hice más que eso”.

Pero ¿cómo iba a reconciliarlo con mi persona de chica que canta góspel, que fue criada entre grupos juveniles religiosos, que están a favor de las terapias de conversión? Lo que sí sabía es que sentía una gran curiosidad, y aún entonces sabía que la sexualidad no era tan blanco y negro como este vestido”

El dicurso de Katy Perry

No tengo que decirles que nos queda mucho por hacer”, recuerda Perry. “Tenemos que crear espacios seguros donde podamos hacer preguntas sobre nosotros y otros, y donde podamos mantener la conversación viva.”

>“Porque la voz más fuerte en la habitación o lo que vez en tu TV no es siempre lo correcto. Pero esa voz dentro de ti, esa que te empuja a descubrir quién eres realmente, en esa sí puedes confiar.

Ninguno de nosotros tiene todas las respuestas. Pero es momento de liderar con empatía, y gracia y compasión. Ahora más que nunca. Para encontrar esa unidad que necesitamos.

No voy a dejar jamás de ser una luchadora, una aliada, una voz por todas las identidades LGBTQ. Sin importar tu sexualidad, tus pronombres, o lo que termine floreciendo dentro de ti.

¿Es o no?

(Vía iheartkatyperry.tumblr.com)

Katy Perry pudo haber experimentado con otra chica y aún ser heterosexual. Lo que ella sí dijo es que esa experiencia le abrió los ojos.

En 2008, cuando esa canción salió al aire, supe que había iniciado una conversación”.

Tampoco es que la canción sea lo más pro LGBT del mundo:

Besé a una chica y me gustó, el sabor de su labial de cereza. Besé a una chica y espero que a mi novio no le importe. Se sintió tan mal, se sintió tan bien. No significa que me haya enamorado esta noche.

Vale, no tiene nada de malo experimentar y contarle al mundo sobre ello. Siempre que la otra persona sepa cuáles son tus intenciones. La comunicación es clave.

Al menos lo intenta

Puede que Katy Perry no sea el mejor de los ejemplos en aliadas que la comunidad necesita. Pero no se le puede negar el esfuerzo.

A pesar de las meteduras de pata la cantante no deja de aprovechar oportunidades para alzar la voz en favor de los individuos LGBT+.