¡Hola, lesbicanarias! Queda poco ya para que terminemos el repaso a la segunda temporada de Sense8 y es más necesario que nunca una vez Netflix ha confirmado que dará un final a la serie con un capítulo largo especial. ¡Agitad vuestras banderas arcoiris con alegría!

Nos habíamos quedado con que de repente Jonas ¿estaba vivo? Los sensates lo entienden tan poco como nosotras porque lo sintieron morir y Jonas se explica regulín, pero nos queda claro que alguien intercedió por él porque ahora vive en un loft de esos carísimos. Al parecer uno de los de la organización le salvó el culo. Bueno, no entendemos nada de esto y al menos los demás tampoco. Nomi y Amanita están en modo brainstorming, lo que significa que el clúster y Amanita están en modo brainstorming. Y ella tan pancha mientras Nomi habla con ellos, es una más.

«Entonces si acierto esta pregunta gano un quesito rosa, ¿no?»

A mí esto es algo que nunca me va a dejar de fascinar de Amanita y de su relación. En fin, al final Whispers se les escapa, como habréis imaginado, pero consiguen registrar su casa.

Lito está deprimidito en casa tras haberse quedado sin agente, mientras Hernando y Daniela intentan animarlo. Pero no hay manera, lo que Lito quiere es pasarse el día tomando helado en pijama. Me siento muy representada por él en este momento. El caso es que como está con la bajona se le aparece a Sun, que no tiene el chichi pa farolillos y va a pasar la noche en un motel. Ya sabemos que Lito es bastante melodramático y se le tira en la cama a llorar, se pone a explicar que lo ha perdido todo (incluidos sus seguidores de Twitter e Instagram, que esto es ya el drama millenial definitivo!) y que ella jamás podrá entenderlo. A Sun le toca un poco la ovariada y pone los ojos tan en blanco que no se le ve la pupila, así que empieza a citar a toda la gente que tiene en su vida que lo quiere porque ella sí que no tiene a nadie. Lito se da cuenta de que igual por eso está ahí con ella, para ayudarla, así que la tumba a su lado en la cama y se quedan los dos abrazaditos a unos cojines.

(L) (L) (L)

Ojalá tener sensates para que te cuiden así cuando te sientes sola, ¿que no? Qué cucada 🙁

En otro orden de cosas, Kala tiene la cabeza hecha tutti-frutti porque quiere que Rajan le cuente qué pasa con la compañía farmacéutica, entonces cree que la mejor opción es contarle ella todo lo que le está pasando con lo de ser sensate. GREAT PLAN. Will está como… «¿a quién quieres engañar? quieres contarle eso porque estás enamorada de otra persona». Ja, te pilló! Kala no sabe dónde meterse así que cambia de tema rápidamente y porque no puede meterse debajo de la tierra, que si no se metía. A ver, tía, que compartes emociones con él, que sabe lo que sientes. Y toda persona que te vea interactuar con Wolfgang también, honey. DUH. Por su parte, Lito está viendo la película favorita de su madre como siempre que está tristón, así que Daniela y Hernando se le unen. Hernando está sobreanalizando el momento, pero Lito siente que su sueño está acabado y es muy triste verlo así. Que alguien le lleve una mantita y una peli de Disney.

A todo esto, va media hora de capítulo y apenas han salido Nomi y Amanita. QUIERO UNA HOJA DE RECLAMACIONES. Pero ya está, ya llegan, puedo apagar mi antorcha. Como siempre han estado investigando y explican a Sun que tiene una oportunidad para colarse en una gran fiesta de negocios que va a organizar su hermano, pero para eso tendría que hacerse pasar por bar-woman. ¿Que lo lleva crudo? Pues no, porque en un grupo de ocho personas alguien convenientemente sabrá mezclar alcoholes variados lanzando cocteleras por el aire. Y ese alguien es Lito. Voilá.

«Me encanta que los planes salgan bien»

Fucking nice. Esto está hecho. Recordamos, además, que Riley sigue en Chicago con el amiguito policía de Will de guardaespaldas y Wolfgang continúa en medio de su guerra de clanes. La Lila esta de las narices sigue metiendo cizaña y el nuevo socio de Wolfie intenta sacarle información al respecto porque cree que le va a traicionar, pero Wolfgang no es tonto precisamente. Es un poco violento, pero tonto no. El problema es que Lila tampoco y le monta una trampa. YOU SHADY BITCH.

¿Os interesa algo de lo que le está pasando a Capheus? A mí tampoco, la verdad. Creo que el personaje perdió bastante adorabilidad con el cambio de actor, aunque a favor está que el antiguo era aparentemente un imbécil, así que no me da pena. El caso es que como ahora está metido en política, el pandillero de la temporada pasada le advierte de que tenga cuidado porque está en una posición peligrosa y su oponente querrá cargárselo. Oye, eso seguro que le tranquiliza un montón.

Volviendo a Nomanita…

Es el único contacto físico entre Nomanita en el capítulo. Habrá que conformarse

Confirmamos de nuevo que son un amor. Nomi está probándose el vestido para la boda de su hermana, pero no está demasiado segura porque no le gusta llevar tacones. ¡No los lleves, tía! Vete descalza cual boda hippie, yo te apoyo. Love is in the air. Amanita, que la conoce como la palma de su mano, enseguida le dice que sabe que tiene ansiedad porque su hermana le pidió que hiciese un brindis y está de los nervios por tener que hablar delante de sus padres. Yo también lo estaría si me hubiesen intentado hacer una MALDITA LOBOTOMÍA. O sea, ¿por qué no están en la cárcel? Nomi está como “qué bien me conoces, jodía”, porque tienen esa unión que por mucho que sus sensates le lean los pensamientos siempre será distinta.

A la par que esto se van sucediendo varias escenas porque Wolfgang se le aparece a todos en su vida diaria mientras pasa de largo y aquí enseguida se dan cuenta de que algo malo pasa. ¿QUÉ VAS A HACER, WOLFGANG? No seas terco, habla con tu clúster. Resulta que se va a encontrar con Lila y Will piensa que puede ser una trampa, así que se ponen manos a la obra. Kala está que se sube por las paredes. Nomi le dice a Amanita que tienen que sacar los portátiles (que todo lo consiguen hacer con ellos, ni Lisbeth Salander, oye) para investigar sobre los posibles asesinos que habrá en ese restaurante para cargarse a Wolfgang, pero justo se le rompe un tacón y se mete una buena contra el suelo. Como no tienen a Nomi para dirigir la operación (está con una contusión en el sofá, mi pobre hija), Amanita decide cogerle el móvil y llamar a Riley.

«Por fin te conozco y yo con estos pelos, madre mía»

Está muy bien este momento porque Amanita ve a Riley y la identifica y dice wowww completamente estupefacta, que se le caen un poquito las bragas en ese momento. Same, Amanita. SAME. Es una bonita manera de conocerse. Accidentada, pero bonita. Tranquilas todas, que Nomi está bien y sólo necesita descansar.

Amanita tiene a Bug de apoyo y Riley está a través del teléfono en unos ordenadores de la policía (a los que se supone que no debería tener acceso, pero es que Diego le permite todo porque es un SER DE LUZ). Lila intenta seducir a Wolfgang, que en realidad lo que está haciendo es ganar tiempo mientras su clúster rebusca la información necesaria.

«Vamos a llevarnos bien, porque si no van a haber hondonadas de hostias aquí»

¡Ya están todos preparados para la acción! La de tiros y hostias que vuelan en ese restaurante, lesbicanarias, no lo sabéis bien. Bueno, lo sabéis si habéis visto la escena, que es bastante molona. Como viene la policía, Lila se tira al suelo y finge que es una muchacha cualquiera a la que han atacado en el restaurante, así que Wolfgang (y por extensión su clúster) tiene que salir por patas. Qué rabia le tengo a esta tipa, qué rabia. CAERÁS.

Pero en este episodio ya no, porque ha tocado a su fin. Nos vamos acercando también al final de temporada, así que más les vale darnos algo bueno. Pray for Nomanita.