Rocío, Carlota y Vera, son tres amigas que están a punto de separarse porque Ró se va a estudiar fuera y hay que despedirla por todo lo alto. La idea era buena, pero cuando las tres se topan de frente con un montón de líos de su vida, deciden que irse de viaje un fin de semana a Oaxaca podría ser la mejor cura para sus problemas. Esta es la premisa de Desenfrenadas una nueva serie mexicana en Netflix a la que les recomendamos que le echen un vistazo.
La premisa de una clásica «Road Movie» ya tenía pinta interesante, sobre todo cuando está protagonizada por chicas. Pero como dice la receta, para que esto funcione nuestras protagonistas se tienen que topar de frente con algo que les ayude a avanzar en su búsqueda vital. Y en el caso de desenfrenadas es un alguien llamado Marcela, una chica que se une a su viaje de la manera más poco convencional posible, pero que las hará toparse de frente con una realidad completamente distinta a la que están acostumbradas.
¿Les suena interesante? Pues échenle un vistazo al tráiler para que terminen de ver si las llama.
Desenfrenadas es una serie que se ve rápidito, son 10 episodios de más o menos 30 minutos cada uno, así que unas 5 horas en total que se consumen a la velocidad de la luz. Hay series que empiezan con un ¡bang! y te enganchan desde el minuto uno. Tengo que advertirles, que al menos en mi caso, me costó entrar en materia. El primer episodio me pareció flojillo y probablemente no hubiera seguido viéndola si no hubiera sido porque me la recomendó Yovanu y tengo mucha confianza en sus gusto para ver series lésbicas. Así que, si se animan a verla, aguanten hasta el tercer episodio por lo menos, porque esta es de esas series que va creciendo a medida que pasan los episodios.
Entre las mejores cosas que tiene la serie está la química que tienen las protagonistas entre ellas. Porque aunque son muy diferentes (cada una representa un tópico de la sociedad méxicana) viéndolas interactuar te crees que son amigas de toda la vida. Además, pese a lo que puede parecer en los primeros capítulos, en esta serie no hay «buenas o malas» a secas, cada personaje tiene sus virtudes y sus defectos lo que la hace más divertida.
Desenfrenadas intenta hablarnos de cómo las decisiones que tomamos afectan nuestras vidas y muchas veces nos boicoteamos a nosotras mismas con las mejores intenciones. De la importancia de la amistad y de rodearnos de gente diferente para ser capaces de entender mejor distintas realidades y hasta comprendernos mejor a nosotras mismas. Nos habla del amor no como ese sueño dorado de los cuentos sino de una realidad con la que podemos toparnos en el más inesperado de los lugares.
Otra cosa que me ha gustado como mujer mexicana, es ver una serie de televisión hecha en México que no se centre en el narcotráfico o la drogadicción. Me alegra ver que los guionistas mexicanos están empezando a salir del cascarón y planteando historias diferentes y con mayor o menor acierto creando contenido más divertido y original.
No quiero hacerles spoilers, así que por eso no les contaré nada sobre la trama lesbicanaria, en gran medida porque creo que es una de las sorpresas más interesantes de la serie. Yo sabía que me iba a topar con una historia pero nunca pude adivinar cuál de los personajes sería y eso me ha gustado mucho. Así que las envío con los ojos cerrados a ver si ustedes sí que le atinan.
Les advierto, Desenfrenadas no es una serie que vaya a cambiar su vida para siempre, pero es que tampoco lo pretende. Eso sí, es una serie que las va a entretener y que las dejará con ganas de más, así que crucemos los dedos porque Netflix la renueve y tengamos una segunda temporada que nos lleve a profundizar mucho más en los personajes.
¡Corran a verla y ya me contarán que tal les pareció la serie!