Callie y Arizona: resumen de episodio 10×18 Anatomía de Grey

La semana pasada en Anatomía de Grey descubrimos lo que hubiera pasado con Callie y Arizona si Cristina hubiera decidido seguir con Owen. La verdad nos quedamos tranquilas chicas, porque parece que no importa que tipo de realidad enfrenten, estas dos están más pegadas que mi dedo aquella vez que intenté pegar mis gafas con pegamento ultra resistente… (aún escribo con tres dedos XD, na es broma).

Nuestro episodio comienza con Arizona atendiendo a una pequeña humana que le estornuda en toda la cara. Para hacer más dramática la cosa, nos muestran en cámara lenta como la pequeña le pasa sus gérmenes a la patinadora y créanme, no fue bonito. Sobre todo cuando después vemos a la rubia caminar por todo el hospital y repartirlos por todas partes. Creo que he quedado traumatizada, de ahora en adelante llevaré uno de esos jabones para limpiar las manos en seco a todos lados.

Arizona se encuentra con Alex y le dice que tiene que cambiarle todas las operaciones de mañana porque tiene claro que va a estar super enferma. Él la ve más sana que una manzana, así que le dice que no entiende que repentinamente se haya convertido en una oráculo y pueda leer su futuro como para saber que va a caer en las garras de la enfermedad. Y es que nuestra rubia tiene un sexto sentido y su cuerpo ha notado como que un visitante misterioso se ha instalado dentro de la casa. Vamos que tiene claro que para la noche caerá enferma.

Alex quiere cancelarlo todo, más que nada porque Arizona le ha pedido a un doctor amigocho que venga a enseñarle a Alex a operar a un pequeño que ha nacido sin el ano perforado, o como diría Karev: «sin hoyo en el culo». Pero Arizona sabe que oportunidades como estas no hay muchas, así que lo manda a freír espárragos y le recuerda que le cancele todas las operaciones de mañana con motivo de su inminente enfermedad.

Más adelante vemos al equipo «Pediatras» encontrarse con Callie. Arizona de inmediato le pide a Callie que mañana le cambie el turno y recoja a Sofia porque va a estar enferma. Alex se nefastea porque piensa que está loca, pero la morenaza se lo toma muy en serio y le dice que no debe dudar del «superpoder» de Arizona.

¡Señoras la patinadora ha evolucionado cual pokemon! Ahora aparte de ataques de «super sonrisas» y «velocidad patines» tiene el poder de la adivinación, al menos en cuanto a saber cuando va a caer enferma se trata. Su única debilidad es la mínima posibilidad de que te meta el cuerno si pierde una pierna con una cirujana buenorra. Pero ¿cuantas veces puede pasar eso en una vida? ¡Ay Dios! Que esto es Anatomía de Grey… ¡Naaaaaa sería muy redundante!

En fin, Arizona le pide también su mujer que cancele la cena que tenían mañana con Pam y no sé quien. Son mujeres muy sociales por lo visto. Callie le dice que eso se lo deja más bien a ella porque todo el mundo está cayendo enfermo por una rara enfermedad (sip la misma de la niña) y ahora mismo anda sin residente así que tiene trabajo hasta las orejas.

Karev le pregunta a Arizona si el doctor «hoyoenelculo» va a aparecer y en un momento de esos irónicos de la vida, el hombre está justo detrás de él XD. Mala suerte Karev. Igual el tipo no se hace mala sangre, saluda de beso en la mano a Arizona que le responde con un «Ollie» y luego le dice a Karev que no se ha ofendido, que ya llorará sobre sus pilas de dinero cuando llegue a casa. ¡Juas! Este hombre es divertido.

Mientras tanto, Jo está atendiendo a un hombre que se cortó y no quiso ponerse la vacuna contra el tétanos porque le tiene fobia a las medicinas y cree que son el mal. ¿Resultado? Una infección gigantesca. Jo, como buena doctora quiere curarlo, pero el hombre no quiere que le pongan nada y la pone de mal humor. Ahí están los dos discutiendo cuando de repente a él le entra una espasmo raro y ella lo intenta detener y ¡zaz! brazo roto que te pego. ¡Auch!

Ya en el quirófano la cosa está muy animada, porque a el doctor «hoyoenelculo» le gusta poner música de los ochenta de fondo en sus operaciones y todo el mundo andaba operando al ritmo de la canción. Es bastante gracioso, aunque Karev como es un gruñón está ahí con cara de amargado.

Esta escena no es demasiado interesante excepto por el bailesuco que se echa Arizona en cierta parte de la canción. Por lo demás pasa sin pena ni gloria. Me encanta ver a Arizona tan contentilla. Lo estoy disfrutando a tope porque después de dos temporadas de amargamiento una sonrisa es como un vaso de agua en un desierto.

Del otro lado del hospital, Callie y Jo están revisando las radiografías del hombre con el brazo roto. La morenaza se da cuenta de que al tipo se le rompió antes por otra parte y no se le curó bien, así que ahora para arreglarle la nueva rotura tiene que romperle otra vez el hueso por el otro lado y arreglarle las dos de un tirón.

Jo está en plena depresión porque cree que la ruptura del hueso fue su culpa por haberlo agarrado con un exceso de fuerza por estar enojada, pero Callie le explica que ni al caso, que más bien fue por el espasmo que le provocó el tetanos. Luego le dice que será ella la encargada de romperle el brazo para curárselo.

Callie entra a prepararse para la operación y se encuentra a Jo discutiendo con Alex. Ella está fúrica porque Alex no ha pagado sus deudas como estudiante y no le está prestando atención y claro se le van acumulando a tope. Él pasa de todo un kilo, lo que hace que se ponga más nefasta. Callie se muere de la risa y Jo se disculpa y le pide un minuto para recomponerse y bajarle a su furia, pero la morena le dice que ni al caso, que más bien se la guarde para la operación porque la va a necesitar para romper el hueso.

Por otro lado el «equipo pediatra» está hablando de la cirugía. Arizona está super contenta y a Alex la operación le resultó interesante, pero el doctor «hoyoenelculo» no le acaba de caer bien. La patinadora piensa que el hombre es un genio y la verdad es que es bastante cool, solo Karev puede odiarlo por su mala leche jaja.

Ya en el quirófano, Callie le pide a Jo que rompa el hueso y la mujer le da un golpecito de nada. La morena se ríe y le dice que no sea blandengue, pero Jo tiene miedo por el paciente porque cuando mete caña la mete de verdad, no por nada ha mandado a tres hombres al hospital. La residente quiere curar gente no hacerle daño.

Callie le explica que esa es la magia de Orto, tiene que meter caña con todo y la inspira de tal manera que Jo le da un buen macanazo y rompe el hueso perfectamente.

Callie está encantada con el resultado y Jo está radiante porque lo ha hecho de maravilla, así que las dos pasan al tema taladro. A mi me daría miedo que mis doctoras estuvieran tan ilusionadas de hacerme hoyos en los huesos, menos mal que estamos dormidas mientras nos operan chicas.

Al final todo sale bien y el paciente queda curado, así que tanto Jo como Callie se lo están pasando bomba. La residente tiene una sonrisa del tamaño del universo en la cara.

Callie: ¡Oh! lo estás sintiendo ¿verdad? El brillo de Orto. Jo: ¡Ahh! ¿Esto es lo que siento? Callie: ¿Sabes? Yo a veces puedo tener también muy mal humor. He tenido mi buen par de cosas por las cuales estar enojada. Orto me ha salvado un par de veces. Saco mi furia, en el proceso curo a alguien y me pagan. Todo son ganancias. Jo: Ahora mismo siento que jamás podría volver a enfadarme. Callie: Cariño… sales con Alex Karev, siempre tendrás razones para estar enojada.

¡LOL! Veo mucho potencial para Jo jajajaja. Sobre todo porque Callie tiene razón, salir con Alex es una fuente de furia continua. ¡Cuidado con la nueva ortopedista en desarrollo! Ya tenemos equipo Orto.

Volviendo al equipo pediatras, Alex pasó la tarde con el «doctorhoyoenelculo» y el hombre le ofreció un trabajo que bien podría pagar sus deudas de estudiante, así que se lo está pensando seriamente. Sobre todo cuando le pregunta a Arizona cuanto gana y esta no quiere contestarle.

Luego nuestra pediatra se deprime porque se acaba su turno y no está enferma. ¡Ha perdido su toque!

Al terminar el día, Callie está hablando de su gran experiencia como maestra de Orto con una ilusión que parecen tres

Callie: Ha sido emocionante. Conoces a alguien y tienes esta conexión… simplemente hicimos clic. Ella es… no sé. Ella lo entiende. Ella me entiende. Y todavía puede que no funcione. Solo el cuatro por ciento de los ortopedistas son mujeres. Pero por eso sería mucho más genial.

Ahhhhhh Callie está enamorada, jajaja, bueno enamorada de la idea, no se me asusten muchachonas, porque de hecho a la que le está contando todo esto es Arizona. Que por cierto lanza un grito de ayuda que hace que Callie entre casi volando al baño.

Callie se encuentra a su mujer tirada en el piso y se asusta porque piensa que se cayó, pero no, lo que pasa es que Arizona al final ha caído enferma y por eso está tirada en el piso jajaja. Podría parecer un mal final, pero la patinadora tiene una gran sonrisa en su cara porque ¡no ha perdido su superpoder! LOL.

Y así señoras terminamos este episodio de Anatomía de Grey. Me ha encantado ver a Callie como maestra, porque por fin parece que va a tener un residente para ella. Nunca había tenido un protegido, cuando se fue Arizona a África durante un episodio parecía que Alex iba a ser el elegido pero al final se devolvió a pediatría, así que espero que esta pareja de trabajo funcione. ¿Ustedes cómo lo ven chicas? ¿Les gusta Jo como para Orto? ¿Les gustaría tener el superpoder de Arizona?