Este post es parte de una serie mediante la cual podrás vivir junto a BetteLover la experiencia de asistir a una convención de L word. Puedes encontrar información sobre la siguiente convención de la serie en la web oficial.

Lo primero que hicimos al entrar en la sala donde era el meet&greet fue correr sin saber bien qué mesa era la mejor. Pillamos una de las del centro, (habría como unas 15 mesas redondas grandes), dando directa hacía una puerta central del salón, por lo que pensamos por un momento que quizá las chicas saldrían por ella y directamente encararían nuestra mesa, pero no fue así y salieron por la puerta que había en el fondo.

No hay forma de describir lo que sentí cuando vi salir a JB, de verdad no puedo. Parece tan lejana e inaccesible y sin embargo estaba allí, sencilla cercana y humilde, (naturalmente estaba guapísima, pero de las primeras cosas que se me vinieron a la cabeza fue escudriñar su vestuario y compararlo con el de sus compañeras. Por ejemplo, no llevaba tacones, calzaba unas botas negras de montar planas, Rachel llevaba unos tacones altísimos, Laurel y Janina también iban con tacones).

JB se quedó en las primeras mesas que encontró en ese fondo, mientras que Laurel y Rachel comenzaron por el fondo contrario, del cual estábamos más cerca. Nosotras mientras tanto en el centro a verlas venir con los nervios saliendo por las orejas.

En nuestra mesa había 9 personas, contándome yo, y se dejan 2 sitios libres para la actriz y su asistenta. Estaban, de derecha a izquierda, dejando eso dos asientos libres, Anouk (holandesa), Fátima, Ingrid y ladyM, una señora (y digo señora porque rondaría los 70), de Portland, EEUU, Gabriela (la chiquita Argentina), dos alemanas (hija y madre) y Kit, mi amiga de Liverpool.

La primera que se sentó con nosotras fue Adrienne Wilkinson, muy simpática y contenta de repetir convención tras convención. Tras unos diez minutos o así nos toco con [tag]Laurel Holloman[/tag] y lo primero que nos dijo mirando hacía Nuria y hacía mi fue “I remember your faces”, estaba emocionadísima al ver el cariño con el que las recibimos y nosotras claro encantadas, además que te diga que te recuerda es un puntazo porque en el L3, la convención en la que la conocimos personalmente, había unas 2000 chicas y el hecho de que nos recordara significa que de alguna manera nos acercamos a ella.

Todo muy emocionante, muy de poner los pelos de gallina y la lagrimilla en el ojo. Lo primero que le preguntamos fue como llevo el final del rodaje y dijo que el último día fue duro y que lo vivió con Leisha. Cuando cayeron en la cuenta de que aquello era el final de seis años de trabajo juntas les entró la bajona. Regresaron a Los Angeles juntas en el mismo avión y les dio por beberse una botella de vino entre las dos para calmar la tristeza que suponía el fin del rodaje. Las compañeras de Barcelona aprovecharon para preguntarle si había vuelto por Barcelona y ella dijo que había pasado uno de los mejores fines de semana de su vida allí. Lo que no nos aclaró en ese momento o al menos yo no lo entendí, es que el fin de semana anterior, (se quedó en Europa tras la convención en Paris), lo había pasado en la ciudad condal con su marido. Si mencionó que les encantaba Barcelona y que no descartaban venirse a vivir a esta ciudad, puesto que está llena de obras de arte arquitectónicamente hablando, y como su marido es arquitecto estarían encantados de estar por Bcn una larga temporada.

Por supuesto le preguntamos por el futuro y nos dijo que ahora tenía ganas de instalarse en Los Angeles y que sus hijas estudien y crezcan allí y no sientan lo que ella padeció a raíz del divorcio de sus padres y luego con su trabajo de ciudad en ciudad, (me estoy adelantando, esto lo habló en las Q&A el domingo, cuando preguntamos cómo les había cambiado la vida al estar en L Word = memorable momento; pero esto es para cuando llegue al domingo). Profesionalmente le gustaría seguir haciendo cosas en televisión y crear el personaje desde cero y dice que ahora le encantaba una serie que se llama “True Blood”.

De la sexta temporada de L Word no podía comentar casi nada, salvo que habrá parejas a las que le va a ir bien y a otras no. Sobre el spinoff menos, aunque nos chivó algo de una prisión y de que no podía saber si Bette y Tina aparecerían de vez en cuando en él. Lo que sí que nos afirmó es que hay bastantes posibilidades de una película para L Word. Anouk le regaló -traía uno para cada actriz- un llavero con un zueco de madera típico holandés con la inicial de su nombre “L” grabado. Laurel en cuanto lo vio, además de darle las gracias a Anouk, comentó muy contenta: «A mi hija mayor le va a encantar. Seguro que en cuanto lo vea va a intentar calzar con él a su Barbie».

La siguiente en sentarse en nuestra mesa fue la simpática, elegante, amable y bellísima [tag]Rachel Shelley[/tag], que también comentó algo así como que veía muchas caras conocidas en aquella mesa. Las españolas la saludamos con un “Hooooola Chicaaaaaaa” y claro, se descojonó. De todas maneras ese es nuestro grito de guerra con ella desde que la conocimos en L4. Alucinaba con la cantidad de gente que había porque en marzo en L4 fuimos bastante menos. La charla empezó comentándole que tenía que estar feliz porque en L4 nos decía que le encantaría volver a trabajar con Alexandra= Dilan y según todo lo que sabíamos de L6, ella y Dilan volvían, así que nos contestó con un “YESSSSSSSSSS” sonoro y feliz y nos dijo que Alexandra y ella se lo habían trabajado a pulso en el Dinah Shore con aquél famoso beso, que doña Ilene presenció y que ellas le insistieron a Ilene, “¿Lo ves? ¿Lo ves?”, a raíz de la reacción del público presente en el Dinah.

Nos habló de su nueva película de terror que se estrenaría, al menos en UK en diciembre y también comentó que había rodado el piloto para una serie en la que hacía de policía pero que desgraciadamente no iba a ver la luz como serie. Aprovechamos para que nos aclarase dónde vivía su hermana, porque después de la conversación que tuve con ella en la pista de baile de L4 no me quedó claro si vivía o no en Tenerife o si tenía dos hermanas, una en Tenerife y otra en Cataluña. Y nos lo aclaró, su hermana vive en Tenerife y anteriormente vivió en Gerona y ella ha estado en Tenerife y le encanta. Gran Canaria no la conoce, por supuesto le dije que esto era precioso para incitarla a visitarnos. Sé que estuvo utilizando el acento americano por lo que comentaron las compañeras después, para demostrarnos que ya estaba acostumbrada a él, pero yo con mi inglés rudimentario no me enteré.

Le dio mucha tristeza terminar el rodaje y contó que las relaciones que más le gustaron de su personaje fueron la de Dilan y la de Peggie Peabody. En un momento a mitad de charla cayó en la cuenta de que había dos personas en la mesa que no abrían la boca y ni corta ni perezosa se dirigió a ellas, que resultaron ser alemanas que no entendían ni papa de inglés, madre e hija, y prometió que iba a aprender algo en alemán para decirles alguna palabra al día siguiente. Todo un detalle por su parte.. Anouk le regaló su zueco y terminó hablando de lo fashion que le parecía el aeropuerto de Amsterdam.

Luego unos minutos de descanso para que por fin se sentase con nosotras mi adorada Jennifer Beals, que a estas alturas y con lo que ya me conoces podrás imaginarte que estaba como un flan de nervios y en éxtasis visual. Y sí, allí estaba Ella, perfecta, casi sin maquillaje, casi etérea, hablándonos con sus ojos, con sus manos, con sus gestos, con su dulce y sensual voz. Y a pesar de los nervios y del impacto visual yo abrí la conversación. Como ya te conté le dije que parecía una veinteañera que cómo lo hacía y ella me contestó fulminándome con la mirada, que tenía 44 que si ya estaba borracha, solo alcancé a decirle que todavía no. En ese momento me sentí mal por no poder continuar la conversación debido a mi pobre inglés y a mi estado nervioso. Otra española le preguntó que cómo se había sentido durante la ceremonia de apertura y nos comentó que es muy tímida y que estaba abrumada y que las multitudes no son lo de ella y que le gustaban mucho más los grupos pequeños de personas como el de aquella mesa, que eso sí lo podía llevar bien. Le preguntamos con qué temporada de la serie se quedaba y nos comento que la segunda le había encantado como actriz, que fue un trabajo muy serio y duro y que estuvo preocupada porque casi se queda con una arruga en medio de la frente debido a lo triste de las situaciones que interpretaba, pero la temporada en la que más se había reído y divertido fue en esta última, la sexta. Le encantó rodar el penúltimo, creo que dijo, capítulo de la sexta, con las imagines del baile y que ella y Laurel eran un poco malas bailando y estuvieron recibiendo clases por tres días y que quien bailaba muy bien era Rose Rollins. A Jennifer también le gustaría, igual que a Laurel, seguir con algo de televisión y desarrollar un personaje desde cero. Dijo que no le gustaría hacer una serie como el CSI, porque en ella los personajes protagonistas no tienen ninguna profundidad y no se desarrollan nada. Dijo algo de que le habían ofrecido un papel en una película de Don Cheadle. Estuvo encantada de comentarnos que sí que hay proyecto de una película de L Word y nos dio el nombre de la persona a la que debíamos escribir con nuestras demandas sobre ello.

La señora de EEUU le hizo una pregunta política, pero ahí yo me perdí bastante, porque a Jennifer sí que la entendía pero a esta señora muy poquito. Sé que Jennifer participó activamente en la campaña a favor de Obama y la señora le decía algo sobre sí Hillary Clinton sería o no la próxima secretaria de estado, sí a ella, a Jennifer le parecía bien, y JB dijo que sí que le gustaría que Hillary Clinton fuese la próxima secretaria de estado. Creo que JB se dio cuenta que a las demás no nos interesaban mucho las cuestiones políticas de EEUU y pronto dejó ese tema atrás. Gabriela, la chica de Buenos Aires, le preguntó sobre sus escenas con Laurel y sí había mucha improvisación en ellas, a lo que JB dijo que improvisaban muchísimo y nos contó como ejemplo, que la escena entre Bette y Tina, cuando Tina viene a comentarle lo de que el novio de Kit se está tirando a la nany, y piden lo mismo al camarero, fue totalmente improvisada.

Una cosa que no entendí o que se me escapó fue que JB comentó que en la mesa anterior a la nuestra había mantenido unas conversaciones muy raras sobre la serie Buffy. Por lo visto estaba conformada por fans de ese show. Su intención era seguir hablando con nosotras pero la asistente prácticamente la arrancó de nuestra mesa.

Todavía le quedaban unas cuantas mesas por conocer. Yo sólo sé que me quedé allí sentada y con ganas de irme a las mesas donde ella se iba sentando, pero obviamente, eso era imposible. Al rato las compañeras de mesa se levantaron y se fueron, yo me quede todo el rato que pude observando detalles de mi diosa JB. Me fije que cuando se levantaba de las mesas se colocaba la faldita delicadamente, (no sé si era un vestido como de algodón negro con un jersey encima o una blusita con el jersey y una falda). Como accesorios tenía una pulsera de madera y un collar a juego tambiñen de madera, oscuros también. También me fije mucho en sus manos: uñas cortitas, manos grandes, pero delicadas, perfectas en la forma y en el color, me encantaron.

Me fui de la mesa por vergüenza no sea que se fijara en mí y viera que no le quitaba la vista de encima y fuese a pensar que era una fan loca, pero me hubiera gustado que alguna de la mesa se hubiese quedado acompañándome. Así no hubiese sido tan descarado. Abandoné la sala sobre las doce y media de aquél memorable viernes, pero sé por lo que contaron después que JB fue la última de las actrices en terminar el meet&greet y que salió de allí pasada la una y cuarto de la madrugada del sábado.

Ya sé que me queda una actriz por comentar, pero es que JB me puede.. Y no sólo a mí, sé que estuvimos más nerviosas todas cuando ella llegó y que por supuesto Jennifer Beals impone un güevo y no porque vaya de diva; ni mucho menos: ahora que tuve la oportunidad de tenerla cerquita; creo que impone tanto; no solo por su belleza exterior sino por la de dentro. Es casi transparente en sus emociones y supongo que por eso le da tanto miedo estar con desconocidas/os. Le van las causas que parecen perdidas de antemano y le gusta ponerse del lado de los que no son tan fuertes y le gustan los retos y los desafíos. Es toda una activista, a pesar de su timidez y su miedo a las aglomeraciones humanas.

Me queda [tag]Janina Gavankar[/tag], que fue la última en venirse con nosotras a la mesa y la recibimos con un “Papi´s in the house” Aliiiiiisiiiiiiiiiia y ella descojonadísima. Es una tía muy cercana y simpática y por supuesto es mucho más guapa al natural que en la pantalla. Nos contó que Leisha y Mia son las más que improvisan en el show. El grito de Fuking carmelita Tropicana de Bette en el partido de basket no fue improvisado y sobre lo de Mia con su café del starbucks comentó lo siguiente: “Mia se plantó de esa guisa en el set y el director quería que pasara del café, pero Mia se negó. “Jenny la llevaría”, le dijo Mia al equipo y así se quedó Jenny con café y sus mega gafas de diseño”. Sin duda para Janina sus escenas favoritas fueron esta del baloncesto y la del dormitorio de Alice, cuando se juntan ella, Alice, Tasha y Helena.

Janina también nos contó que había rodado 2 capítulos de Anatomia de Grey y que le encantó el ambiente del set y que volvería sin dudarlo si la llamasen otra vez.

También nos contó que estuvo encantada de trabajar con las chicas de L Word que la habían acogido muy bien y que nunca supo porque Papi desapareció en la quinta, pero que estaba contenta de volver en la sexta.

Anouk le dio su zueco y le hizo mucha ilusión: “Oh, me encanta. Es que yo soy medio holandesa. Mi madre es medio holandesa”. Buscó a su madre para enseñarle el regalo ” Mira, que zueco más bonito» (es que su madre la aompañó a la convención). En USA se ríen de mí cuando les digo que yo he llevado estos zuecos de madera y me dicen venga ya pero si eres negra“. Janina abrazó a Anouk en agradecimiento por su regalo.

Y colorin colorado el meet&greet se ha terminado.

Pues como les decía arriba yo me fui del salón dejando atrás creo que sólo 4 o 5 mesas llenas y Jennifer entre ellas. Me junté en la disco con las amigas y a bailar no sé hasta qué hora. Pero muy contenta de haber hablado con JB Y con la cabeza puesta en el día siguiente y en todo lo que esperaba.

Enlace: BetteLover | Fotografías cortesía de: Eliška

Este post es parte de una serie, puedes leer otras partes aquí:

  1. L5 convención de L Word: El inicio de la aventura
  2. L5 Convención de L Word: Meet & Greet
  3. L5 convención de L Word: Q&A el momento cúspide
  4. L5 convención de L Word: el fin de la historia