Señoras este fin de semana estoy feliz- Primero porque este episodio de Anatomía de Grey ha tenido grandes dosis de Arizona y unas cuantas de Callie. Y segundo porque me han concedido la nacionalidad española. Ahora soy binacional :P, aún me quedan unos cuantos meses de espera, papeles y mucha burocracia de por medio, pero por lo menos me la han concedido. Pero pasando a los temas que realmente les interesan vamos a hablar de lo que pasó entre Callie y Arizona esta semana.

Arizona y su pierna rota

Empezamos el episodio con Arizona corriendo por el parque… ais… que lindas piernas tiene… bueno tenía… bueno ustedes me entienden. La mujer está ahí, más feliz que una lombriz haciendo ejercicio cuando de repente le llega un aviso y tiene que salir pitando al hospital.

El caso es el de una mujer que ha estado en un accidente de avión y tiene una fractura abierta de fémur que parece infectada. ¿Les suena de algo? La camilla entra por urgencias a toda máquina y la patinadora intenta seguirla para curar a la paciente pero la pierna empieza a dolerle y cuando se mira se le rompe como si fuera de cristal. La pobre cae al suelo y está ahí doliéndose cuando de repente despierta de su sueño. Ha sido todo una pesadilla.

Callie se despierta también pero la rubia le dice que no pasa nada y se vuelve a dormir. Claro que nosotros sabemos que sí que pasa algo. Nuestra Arizona esta sufriendo del «miembro fantasma», es decir está experimentando mucho dolor en la pierna que ya no tiene.

Callie con Derek

Al otro día por la mañana, Callie está preocupada porque Derek quiere empezar a usar la mano con una operación super hardcore. La morena le insiste en que igual sería mejor empezar con algo más ligero, pero no hay nadie que pueda operar al chico más que él así que está decidido.

Arizona mientras tanto está junto a Alex y Cristina operando a una pequeñuela de África. Recordemos que el programa que fundó Karev no se ha detenido. Ya en el quirófano la rubia empieza a experimentar muchísimo dolor otra vez, así que una excusa sale del quirófano y se va a esconder a una sala de descanso, pero para su mala suerte tanto Owen como Alana (aka la doctora recortes) entran justo a esa sala.

Arizona avergonzada

Ya no puede uno ni sufrir en paz en este hospital

Alana se queda un poco sorprendida porque Arizona está sentada, con cara de dolor a full, nerviosa y sin la prótesis, así que Owen le pide un poco de tiempo a solas para poder hablar con la rubia. Él de inmediato se da cuenta de lo que le está pasando, le comenta que Callie le había dicho que solo le pasaba por las noches pero al parecer justo hoy ha empezado a pasarle también por el día.

Owen saca un espejo y hace que la pierna «buena» de Arizona se refleje en el de manera que parece que de nuevo tiene dos piernas. El hombre le explica que hay muchas terapias para tratar ese padecimiento y que no se está volviendo loca, que el dolor es real. Luego le pregunta qué le ha aconsejado Callie, después de todo la morenaza sabe más que nadie del asunto, pero Arizona no quiere contarle a su esposa lo que le está pasando.

Arizona sincerándose con Owen

He sido la paciente de Callie por tanto tiempo…apenas estoy empezando a volver a sentirme como su esposa otra vez y ella me necesita. ¡No puedo tener esto! Por fin estoy recuperando mi vida y no voy a permitir que me la esté jodiendo algo que ni siquiera está ahí.

Owen la entiende al segundo y le promete que los dos trabajarán para deshacerse del dolor. Me gustó mucho el mini discurso de la rubia porque ya me estaba poniendo de los nervios que no se lo dijera a Callie. Después de todo, ¿Quién mejor cualificada que su esposa para ayudarla? Pero dado la trayectoria que llevan las dos y los momentos que han pasado en los últimos episodios, es super natural para Arizona el no querer que su esposa la siga viendo como alguien a «quien tiene que cuidar» como «paciente». La pediatra está luchando por volver a la normalidad y no quiere cargar a Callie con otra cosa más.

Estoy segura de que si Callie se enterara tampoco sería malo, incluso que preferiría saberlo, pero entiendo la decisión de Arizona de enfrentarlo ella sola perfectamente.

Arizona discutiendo con Karev

Alana se acerca a hablar con Karev y Arizona porque va a estar supervisando ciertas cirugías y quiere saber si la pediatra llevará la siguiente (recordemos que en la primera dejó a Karev por el dolor). La patinadora responde sin dudar que ella va a encargarse, pero cuando Alana se va Alex le dice que igual mejor se lo tome con calma.

Karev está preocupado porque no quiere que cierren el programa y se da cuenta de que Arizona no está del todo bien, pero la pediatra no le dice que tiene e insiste en que será ella quien lleve el caso.

Arizona asustada

Al otro día vemos a Cristina, Karev y Arizona en el quirófano operando a la pequeña por segunda vez. La rubia está lista para hacer el corte e iniciar, pero cuando empieza a cortar con el bisturí la pierna le duele tanto que se ve obligada a gritar. Cristina y Karev no entienden nada y se la quedan viendo como si estuviera más loca que una cabra. Arizona se recompone y prosigue con el corte pero de nuevo el dolor la atenaza y cuando mira a su pierna se da cuenta de que tiene otra vez la fractura abierta de fémur y los aparatos del hospital empiezan a pitar como si se estuviera muriendo.

Arizona cortándose la pierna

Arizona ve que se va y el único remedio que le queda es cortarse ella misma la pierna porque sabe que si no lo hace se va a morir. Así que una escena de lo más gore comienza a cortársela con el bisturí, y en esas está cuando por fin despierta de su pesadilla. ¡Horror!

Igual es interesante ver como se mezcla en sus sueños su subconsciente porque al menos para mi, es claro que ella tiene interiorizado que era necesario que cortaran su pierna para vivir.

Callie preguntando por el bienestar de Arizona

En la mañana, Callie intenta entrar al baño y se topa con que su esposa está ahí encerrada así que se preocupa, pero Arizona le dice que solo está intentando bañarse. La morenaza pone voz sexy y le pregunta si quiere compañía pero la rubia dice que es que se le hace tarde. Igual nosotros sabemos que no es cierto porque la pobre está tirada en el piso haciendo la terapia que le enseñó Owen porque le duele la pierna.

Igual esta escena me gustó porque a pesar de que hay un vidrio de por medio, podemos ver la decepción de Callie cuando Arizona la rechaza con el gesto corporal de Sara Ramirez que siempre es una crack. Igual la morena se comportó como las meras machas y en lugar de sentirse o enojarse hizo cita con su esposa para ver películas en la noche. ¡Callie es puro amor!

Arizona en plan cíclope

¡Dios ahora soy Cíclope de los X-men!

Owen lleva a Arizona a intentar una nueva terapia que consiste en visualizar un mar lleno de olas con una especie de visor e intentar aprender a calmarlas con la mente para luego hacer lo mismo con el dolor. La verdad parece un poco locura para la patinadora que no entiende de que va el tema pero no hay mucho remedio, a menos que quiera probar la terapia menos ortodoxa de clavarse un destornillador en la prótesis. Arizona le dice a Owen que mejor se lo clave en la cabeza jejeje.

Arizona adolorida en quirófano

Llega la hora de la operación y de repente a Arizona le empieza a doler la pierna de nuevo. Owen, que lo está mirando todo, le recuerda la terapia de las olas y la rubia intenta seguirla pero llega un momento en el que el dolor la está venciendo así que quiere que Karev la cubra. El problema es que están en un momento de la operación en el que no se puede mover porque Cristina necesita máxima concentración hasta que termine y cualquier movimiento la puede hacer echar a perder la operación.

Arizona ya no puede con su alma y en un momento de desesperación le pide a Karev que le clave el bisturí en la pierna. Karev la mira con cara de ¡WTF! Pero Owen repite la orden recordándole que en realidad es una prótesis. Total al final Alex se decide y Arizona consigue superar el dolor al verse el bisturí clavado.

Callie y Arizona en la cama

Que sexy es mi chica cuando se enfada

Por la noche, Callie está totalmente indignada porque Alana quiere eliminar urgencias del hospital. Arizona está de acuerdo con ella en que la mujer no es que sea muy amable. En fin la morena piensa que no va a poder dormir del cabreo que tiene pero entonces su esposa la invita a ir a la playa con ella. Callie se sorprende pero deja que su esposa le explique y entonces…

Callie y Arizona en la playa

¿Y la sangría?

Ahí están nuestras chicas, disfrutando de la playa en sus imaginaciones. Todo hubiera sido perfecto si los guionistas hubieran recordado la sangría. Igual no nos vamos a poner nefastas por una margarita, aceptamos pulpo como animal de compañía jaja.

Callie y Arizona soñando juntas

Y con esta hermosa visión señoras nos despedimos esta semana. Todo parece pintar mejor en la vida lesbicanaria de nuestras Callie y Arizona. Ah…que bonito es el amor ¿no creen?