Sí, habéis leído bien. ¡Por fin nos ponemos con Clexa! ¿Qué no sabéis quiénes son Clexa? Pues Clarke y Lexa, dos antagonistas con una química alucinante que la serie The 100 nos ha regalado en 2015. Vamos a ir directamente a su trama, porque su historia se desarrolla en medio de un argumento mucho más complejo y complicado. De hecho Lexa no aparece hasta la segunda temporada, que es precisamente cuando la serie pega un subidón de calidad espectacular. Así que os resumo por si no la conocéis (¡que deberíais avergonzaros!): Estamos en un mundo post-apocalíptico, Clarke es la prota y es de los sky-people (porque vienen de una estación en el espacio en donde la humanidad ha sobrevivido casi un siglazo) y Lexa es de los grounders. Después hay otro sitio lleno de malos que se llama Mount Weather, a donde quieren entrar porque ahí tienen encerrados a amigos suyos. Aquí más o menos empieza la historia de Clexa.

Los grounders en todo su esplendor

Thelonious y Marcus son dos de los sky-people que los grounders tienen encerrados. Llegan estos tíos que veis ahí arriba con pintas de querer matar todo y les dicen que “sangre debe pagarse con sangre”. ¿Qué ha pasao? Pues que el novio de Clarke, Finn, como creía que los grounders le habían hecho algo, se puso loco y asesinó a un pueblo entero a metralleta limpia. Es un chaval que no está muy bien de la cabeza. El hombre barbudo les deja un cuchillo ahí y les dice que para que acceda a hablar con alguno de ellos, uno de los dos tiene que matar al otro. ¡Así, simple!

La muchachita que veis se queda con ellos y les dice que espabilen, porque si se niegan el comandante los matará a los dos con ese mismo cuchillo. Los grounders son así, gente tranquila, sencilla.

«Alguno va a tener que rajar el cuello al otro. Es el modo de vida grounder.»

Clarke está ahí hablando con su noviete, pero lo mira como si fuese Hannibal Lecter porque no le perdona lo que ha hecho en el pueblo de los grounders. Futuro cero os veo. Volviendo al dilema de Thelonious y Marcus, este último intenta suicidarse y Thelonious le pide ayuda a la muchachita, que le deja un pañito para hacer torniquete. ¿Qué pinta ahí? Es la que cuando muera uno tiene que avisar a los marulos de antes. Pero Thelonious hace un movimiento ninja y la amenaza con el cuchillo. Vuelven los marulos y de repente la chica hace otro movimiento ninja mucho más molón y neutraliza a Thelonious en un periquete. ¡Y mirad bien cómo es Thelonious! Que le lleva dos cabezas y dos brazos también. Pero ella es una badass.

Ser dos veces más grande que ella no te da permiso a esto, Thelonious

Os cuento todo esto porque enseguida empieza a dar órdenes a los hombretones, que asienten con la cabeza a modo de “Sí, comandante”. Y es que, amigas lesbicanarias, esta es nuestra Comandante Lexa. Atended al porte que tiene cuando se pone la armadura y los mira como pensando “¿quién ríe ahora, bitches?” Les dice que ha aprendido mucho de ellos, es estratega la tía. Además, insiste en que alguien tendrá que pagar por la masacre. ¡Bullaaaaaaaaa!

«Soy la Comandante Lexa. El gusto es vuestro, evidentemente»

Clarke sigue con su vida complicada en el campamento sky-people. Está también por ahí la ex de Finn y tía guay y lista donde las haya, Raven, que ojalá fuese de nuestro team lesbicanario, al igual que Octavia. La banda sonora de esta serie debería ser “Las chicas son guerreras”, porque son las que manejan el cotarro claramente. Entre tanto llega Thelonious todo ensangrentado con mensaje de la comandante: “Marchaos o morid”. Lexa no se anda con chiquitas y quiere arrasar con todo.

La madre de Clarke, que también tiene los ovarios muy bien puestos, les dice que de eso nada, que de ahí no se mueven hasta que no puedan salvar a todos los que están presos en Mount Weather. Aclaración: la Tierra quedo inhabitable hace siglos por la radiación nuclear, así que los de Mount Weather no pueden salir, llevan generaciones dentro de su búnker porque la radiación los mata. Los grounders y los sky people ya están inmunizados y los atrapan para hacer experimentos con ellos. ¡Son malos malísimos!

«¡Ahhhhh, que te comoooo toaaaaaaa!»

Así es como ha quedado uno de ellos tras haberle inyectado una droga que los medio-convierte en algo parecido a un zombie (en la serie, reaper). Es Lincoln, el novio de Octavia, y además grounder de nacimiento ahora acusado de traición. Bien, vamos bien. Las tribus deben juntarse y remezclarse, claro que sí. Id sentando precedentes ya, que nos interesa… Así que Clarke tiene una idea revolucionaria y propone negociar con los grounders, que temen mucho a los reapers. Y más vale que se den prisa, porque de repente todo se llena de lucecitas alrededor de su campamento. Y no, no es Navidad en el Corte Inglés. ¡Es el anunciado ataque grounder!

Clarke es muy inteligente y en vez de escapar o luchar, propone otra vía: negociar. Se presenta voluntaria para hacer de intermediaria, porque ella conoció a Anya, una grounder que era algo así como uña y carne con Lexa. Y allá que va ella sola ante el peligro. ¡Con un par!

«Soy Clarke of the sky-people y vengo sola porque soy la líder de mi gente, aunque no lo sepan»

Total, que Clarke entra en su tienda, porque el mundo grounder es así tribal y de la vieja escuela, así que tienen tiendas gigantes tipo ejército antiguo para acampar. Ahí que se encuentran las dos cara a cara. ¡Por primera vez! Me entran sudores ya. Es que tenéis que fijaros en el estilo que se gasta Lexa, en su trono, jugando con su cuchillo entre las manos, con su pintura de guerra puesta y mandando callar a su gente con un simple gesto de la mano para dejar hablar a Clarke. ¡LA AMO!

¡Controlad vuestros ovarios!

El caso es que Clarke empieza a contarle que ella logró escapar con Anya de Mount Weather y le da un cacho de pelo, que debe ser algo así como la forma de enviar un mensaje entre los grounders: “Toma, te corto mi trenza y te la doy como símbolo de mi cariño”. Es bonito, no me digáis que no. Parece que esto ablanda el corazón de Lexa, que empieza a fiarse de lo que le cuenta, pero sigue teniendo esa cara de “como me traiciones, te rajo”. Es que hay que quererla.

Lexa: Anya era mi mentora antes de que me llamaran para liderar a mi gente. ¿Murió bien?

Clarke: Sí, a mi lado. Tratando de hacerte llegar un mensaje.

Lexa: ¿Qué mensaje?

Clarke: La única manera de salvar a nuestra gente es si nos unimos.

¡Booom! Era visto. Podéis celebrar vuestra unión con una boda grounder/sky-people. ¿No? Vale, igual es pronto. Clarke le explica que sabe como sanar a alguien que se ha convertido en reaper. A Indra, que es una de las guerreras que está con Lexa en la tienda, se le hincha la vena al escuchar hablar de Lincoln, así que Lexa tiene que imponer su autoridad y enviarla a que le dé un poquito el aire. ¡Sí, relaja la raja, tía!

¡Besaaaaaaooooooss!

Lexa enfrenta a Clarke tal que así y… hay mucha tensión. De verdad que hay mucha tensión y de todo tipo. ¿No lo veis? Pero Lexa no está para andar ligando con enemigos y le dice que demuestre lo que está diciendo. En esto, Abby (la madre de Clarke) está intentando recuperar a Lincoln de su síndrome de abstinencia porque es médica, pero le da un ataque y no hay manera, dice que está muerto, Octavia llora… ¡Se os jodió el plan! Y claro, para cumplir con el don de la ubicuidad de todas las series justo tiene que aparecer Clarke con Lexa en ese preciso momento. ¡Sorpresa!

Como imaginaréis, Lexa se cabrea mucho y ordena que los maten a todos. Mientras pasa esto, Clarke y Lexa se echan miraditas que supongo que tenemos que entender que son de cabreo y de “vais a morir todos aquí”, pero yo sigo viendo una tensión sexual desorbitada. Es que Lexa cabreada es sexy. ¡Mirad lo sexy que es!

En realidad está desnudando a Clarke con la mirada. ¡No nos engañas, Lexa!

Bueno, me calmo. De repente Abby tiene una idea maravillosa y coge un palitroque de esos que dan descargas eléctricas, se lo chanta a Lincoln en el pecho y lo revive. Los grounders están todos flipados en plan “¿qué brujería es esta?” Porque para ellos es como ver magia, son como de otra época. Así que Lexa guarda la espada, Clarke asiente y todo es bonito. Espero que cuando estéis casadas no tengáis discusiones tan fuertes, por favor os lo pido. Ah no, espera, me estoy desviando del tema.

Ya en la tienda de Lexa otra vez, la comandante está regalándole un poco los oídos con eso de que pueda curar a reapers. Todavía está alucinando en colores. Clarke le explica que es a causa de la droga y que con tratamiento todos se pueden recuperar de la misma manera. Esta es la primera vez que vemos sonreír a Lexa. ¡Apuntadlo!

¿La veis? ¿Veis esas comisuras levantadas? ¡Es una sonrisa!

Se comen un poco con los ojos (esto pasa, lo estoy viendo) y Lexa acepta el trato.

Lexa: Podéis tener vuestra tregua.

Clarke: Gracias.

Lexa: Sólo quiero una cosa a cambio.

Clarke: Dime.

Lexa: Entregadme a ese que llamáis Finn. Nuestra tregua comienza con su muerte.

Ok, Lexa, si te quieres trajinar a Clarke lo entiendo, ¿pero no crees que es un poco extremo cargarte a su novio para conseguirlo? Así no te ganas su corazón, te lo digo. Ahora en serio, es una decisión bastante peliaguda. Los grounders parece que no van a dejar pasar la matanza de Finn en el pueblo. ¿Cómo va a acceder Clarke a sacrificar a su novio? ¿Estamos locos? Confiamos en su inteligencia para solucionar este embrollo… Pero es complicado. The 100 hace estas cosas y nos deja el culo torcido. ¡Queremos más!