Sense8: Resumen de episodio 2×09 – Nomi y Amanita

En los últimos capítulos de Sense8, Nomi y Amanita han tenido un protagonismo relativo, pero ahora sí que sí, lesbicanarias, parece que las tendremos un poco más en pantalla porque toca bodorrio. Bueno, al menos la cenita con familia e invitados, que es cuando a Nomi le toca hacer el brindis y está cagada. Amanita intenta animarla y estar ahí para ella mientras ambas le dan un poco al drinking porque a ver quién no lo haría rodeada de gente tránsfoba y homófoba.

La madre de Nomi tiene toda la cara de cogerla por banda y darle una charlita asquerosa (además llamándola Michael, si es que le voy a estampar un sello con ese nombre en la cara) de cómo no debería dar el brindis aunque se lo haya pedido su propia hermana por respeto a la familia. AGARRADME, QUE LE DOY. Nomi, que antes estaba incluso pensando en huir por la incomodidad, decide con el apoyo de Amanita que ahora sí que sí lo da y se levanta al micrófono. Allí se pone como la jefaza que es y lanza un poco de shade a su padre y a su madre antes de ponerse a hablar de las bondades de Teagan, que son muchas aparentemente, porque era algo así como la hija perfecta y tuvieron sus dimes y diretes como pasa a menudo entre hermanas. Pero Teagan fue la única persona de su familia que la apoyó y eso es tope bonito:

La noche anterior a entrar en el hospital fue la más larga y la más solitaria de mi vida pero nadie me detuvo. Cuando me desperté la primera cosa que sentí fue la mano de Teagan sosteniendo la mía. Su sonrisa fue la primera cosa que vi y su voz cantando cumpleaños feliz fue la primera cosa que escuché. En ese momento mi hermana me enseñó lo que significaba de verdad la palabra familia.

Y así es como apoyas a tu hermana, APRENDED TODAS LAS HERMANAS. Total, que la gente aplaude y ambas están emocionadas porque se quieren mucho.

Hablando de familia, a Kala la están rayando un poco con lo de que Rajan y ella tengan hijos, así que está en plan “las mujeres somos más que máquinas de parir”. No exactamente así, vamos, pero que le inquieta a la muchacha como es normal. Tras el tiroteo en el restaurante del episodio anterior, Wolfie está bien y escondido tratando de que no lo encuentren, así que le dice a Felix que igual es buena idea marcharse de la ciudad por un tiempo.

Riley y Will siguen investigando y es así como llegan a una especie de laboratorio montado en un sótano que se supone que fue utilizado para experimentar con varios sensates del clúster de Angelica. Que sí, que ya sabemos que Angelica no fue tan santa y se fue por el lado oscuro porque no vio Star Wars. Y bueno, también descubren que la señora que los informó se ha suicidado allí mismo, en la bañera.

La trama política de Van Damme sigue adelante pero realmente es muy aburrida y no interesa a nadie, así que volvemos a Nomanita que ya están llegando a la iglesia en la que se celebrará la boda de Teagan. Y se han llevado a Bug con ellas. Nomi es una de las damas de honor y tiene que entrar cogida del gancho con un pavo que quién sabe quién es, pero que es el típico tío cishetero blanco con cara de fuckboy. Es que parece elegido a propósito, no puede ser más arquetípico. Obviamente es un gilipollas y le suelta por lo bajini un comentario tránsfobo a Nomi, que no sabe cómo reaccionar porque están en plena boda. Así que Sun le pregunta si quiere que le haga algo de pupi, pero Nomi dice que no porque es el gran día en la vida de su hermana y no quiere montar una escenita. Como el tío este repugnante la ve hablar al aire, se vuelve todavía más gilipollas y ya es lo último que necesita Nomi para dar carta blanca a Sun, que le retuerce un dedito. El tío no sabe qué acaba de pasar pero yo espero que se lo haya roto o al menos le haya hecho un esguince. JÓ-DE-TE.

Durante la boda todo parece transcurrir fantásticamente pero de repente se abren las puertas y aparece el agente Bendix, que no se va ni con agua caliente. Qué cansino ereeeeeeeees! Se supone que va a arrestar a nuestra Nomi así que ni ella ni Bug ni Amanita entienden que ha pasado con el e-Death. Su hermana sale a defenderla  pero su madre no pierde el tiempo y ya se pone a echarle la culpa con «te lo dije» varios que MIRE SEÑORA, VÁYASE A BENIDORM A RASCARSE EL CHIRRI Y DÉJELA EN PAZ. Nomi está muy afectada y se disculpa con su hermana antes de ceder y rendirse ante Bendix (aaaaaaaaaaah, no lo hagas) pero Amanita se levanta de un salto y viene a decir que paren toda esa locura porque ya se ha dado cuenta del error de Bendix. ¿Que cual es? Pues que el idiota ni siquiera se ha molestado en comprobar la orden de detención, que tras la solución electrónica del e-Death ya no existe. Así que cuando le piden que se la enseñe él va a comprobar su móvil y no encuentra nada.

Como su padre es de una firma de abogados enseguida le dice que como no le enseñe la orden, se le va a caer el pelo. Bendix está enfadadísimo preguntándose qué habrá hecho Nomi, así que se pone un pelín violento (buuuuuuh, machirulo) y por primera vez su padre la defiende y dice estas palabras mágicas: “Quita las manos de mi hija”

Nomi llora y moquea porque jo, la acaba de llamar hija y es la primera vez que lo hace en toda su vida. EN TODA SU VIDA, LESBICANARIAS. Que más vale tarde que nunca, pero vaya tela. Total, que Bendix tiene que poner pies en polvorosa porque no le queda otra y la boda continúa para goce y regocijo de todos los presentes. ¡Te salió el tiro por la culata, hamijo!

En otro orden de cosas, Lito aún sigue de bajón pero Daniela no puede ser más maja y se ha quedado toda la noche despierta leyendo guiones hasta encontrar el más perfecto de todos, básicamente es un personaje gay super-bonito que sería perfecto para relanzar su carrera. Daniela lo tiene clarísimo y dice que sólo necesita 58 minutos y dos móviles para conseguirle una cita a Lito con un productor superfamoso. Ponen literalmente un temporizador y la tía se hace pasar por la agente de Lito y con su labia hace algo maravilloso que no se puede explicar bien con palabras, pero hay que verlo. Debe tener un talento natural porque lo consigue y te quedas babeando viendo la escena.

Y qué contentos que están. Los que no están tan contentos son Riley y Will porque resulta que el padre de Will está en las últimas en el hospital y Riley va a verlo, lo que significa que Will también va a verlo en modo sensate. El hombre tiene muy muy mala pinta y hay que recordar que volvió a beber por culpa de Mr. Whispers, así que espero que se lo carguen cuanto antes. El padre ve a Riley y se pone en plan ¿quién coño eres tú? pero después de un rato como que lo ve a él en vez de a Riley (MAGIA SENSATE) y tienen un momento muy bonito para despedirse. Y se muere, claro. Y Will llora un montonazo.

Así acabamos el capítulo y ya sólo nos quedan dos. Ha sido un alivio ver que Nomi ha podido disfrutar de la boda de su hermana sin percances, ha dado su discurso, Bendix se ha ido al carajo, su padre la ha llamado hija y todo contando con el apoyo inestimable de Amanita y Bug. ¿Seguirá la buena racha?