Venice resumen de episodio 2×02

Bienvenidas a las soleadas playas de Venice señoras. Porque en este lugar no les podemos prometer la felicidad eterna, pero el sol está asegurado. ¡He dicho! La semana pasada habíamos dejado a Lara y Ani celebrando su noviazgo, a Gina llorando a mares por todas sus pérdidas y a Owen y Sami en su nidito de amor.

Y esta semana empezamos exactamente donde lo dejamos, es decir en el campamento africano de Owen y Sami. Los chicos han pasado una muy buena noche (aunque yo diría que dormir más bien poco). Así que se levantan de buen humor porque en sus propias palabras la noche ha sido «Amazing». Y es en este mismo momento en el que perdemos toda esperanza de traernos a nuestro bando a Sami. Cualquier lesbiana, bisexual o hetero con tendencias un poco lésbicas sabría que lo decente a decir en estas ocasiones es Awesome.

En fin que lo malo es que no les dura mucho la felicidad, porque cuando Owen enciende su celular se encuentra con cuatro llamadas perdidas de Gina. El niño la llama de inmediato y así se entera por fin de que su padre tuvo un ataque anoche y está en el hospital.

Cambiando a momentos más interesantes y mucho más placenteros nos trasladamos hasta el departamento de Lara. Ani acaba de tocarle la puerta para llevarle un Vainilla soy latte (diossssssss ¡porque demonios no hay Starbucks en Las Palmasssssssssss sufroooooooo). Y como mi madre solía decir: «Mujer que te lleva café por las mañanas es mujer para toda la vida» y así lo reconoce Lara que con una sonrisa de oreja a oreja recibe a su guapa novia y le dice que es la mejor.

Ojitos Azules procede a hacer el movimiento que todas hubieramos intentado que es invitar a la de los cafés a entrar y agradecerle propiamente el regalo, pero desafortunadamente para todas nosotras Ani declina la invitación porque tiene que ir a ver a Gina. ¡¡Aghhhhhh Gina pareces un miércoles siempre en medio!!

Lara como la novia perfecta que aún es en lugar de enfadarse le dice a la morenaza que seguramente Gina necesita a una amiga. Awwwwwwwwwwww.

Ella es tu pasado, pero yo soy tu aquí y ahora, ¿verdad?

Quiero que sepan que ame la risita nerviosa y pregunta medio insegura al final de Ojitos Azules. Y Ani se ganó todos los puntos del mundo al ser honesta con su chica y decirle que se iba a ver a su ex. Aissssssssss es que son la parejita perfecta estas dos.

Al final nuestras chicas se despiden en la puerta con besito y abracito (¡apapachos FTW!) y quedan de verse más tarde por la noche para proseguir con los arrumacos (¡exijo ver esa escena!).

Mientras tanto en casa de Gina, Owen y Sami intentan ponerse al día con todo lo que pasó con el Coronel. Nuestra rompecorazones favorita les cuenta que el hombre tuvo un ataque y fué todo muy rápido. Owen empieza a sospechar que algo raro hay en todo este asunto porque Gina no tendría que haber estado en casa de su padre. Pero la decoradora evita las preguntas de su hermano al más puro estilo de Neo en The Matrix y Sami le echa un cable centrando la atención de Owen en lo importante que es el hombre en el hospital.

Al final se entretienen hablando sobre lo que van a hacer con él porque el Coronel necesita cuidados todo el día y ninguno de los dos puede hacerse cargo. Gina piensa en internarlo en un centro pero Sami propone una enfermera que lo acompañe todo el día. Al final deciden investigar posiblidades pero podemos sacar algo positivo de todo este rollazo y es que Gina empieza a sonreirle a la novia de su hermano y parece que la ve con mejores ojos.

En fin que Sami se despide y deja a los dos hermanos solos y en cuanto sale por la puerta Owen le pregunta a Gina: «¿Qué no me estás diciendo?» Es lo que tiene tener un hermano tan cercano, que se enteran de todo. Es como cuando mi hermana me dijo: «mmm a mi se me hace que tienes algo con la señorita Genix» no se les puede ocultar nada. Por cierto, cuando Sami se va vemos la mano de un hombre misterioso cerca de la casa de Gina.

Luego de hablar con su hermano (al final no nos enteramos que le dijo) Gina procede a llamar su tía favorita y contarle que están pensando en dejar al Coronel en su casa con la super enfermera. Guya está completamente de acuerdo en que el Coronel estará mejor rodeado de sus banderas, medallas y demás parafernaria. También aprovecha para decirle que Van va a volver y quiere arreglar los problemas que tenía con Owen.

¡Wait a minute! ¿Quién es este famoso Van? Su nombre me suena…donde lo he oído…donde…donde…¡ahhhhhh! pues en el cuarto episodio de la primera temporada ¿Se acuerdan? ¿No? Pues menos mal que me tienen a su lado para recordar detalles totalmente inservibles jeje. En ese episodio Gina tenía un libro con un post it que decia: «que lo disfrutes, Van, besos y abrazos».

En fin que a leguas se nota que Owen y el susodicho no se llevan bien porque las dos comienzan a pelearse por ver quien le a anunciar al hermanísimo su llegada. Al final Guya cuelga con besos y abrazos y cuando se gira se encuentra con la mujer de la ventana que la agarra totalmente desprevenida.

Guya piensa que es una clienta que ha venido sin cita pero debería sospechar algo raro porque la mujer la mira intensamente sin decir nada y cuando se gira para buscarle un hueco en su apretada agenda y vuelve a mirar la rubia ha desaparecido. Uhhhhhhh ¿quién será esta mujer? ¡La intriga me corroe!

Pero no tengo mucho tiempo para preocuparme por este asunto porque nos vamos hasta el super bar-cafetería.-lugar de ocio de nuestras chicas. Ahí está Katherine, la mujer a la que Guya le hizo «el servicio» en el segundo episodio de la primera temporada..

Katherine está tranquilita bebiéndo y comiendose unos cacahuates cuando de repente con ese radar que tenemos todas para las chicas guapas vislumbra a una dama de buen ver a lo lejos.

La mujer se desvana los sesos intentando pensar en como acercársele y sacarle coversación. Que si tu bolso está muy bonito, que si me atoré en el crucigrama, que si tus zapatos son requete nice. Ais es que el fino arte del coqueteo es más difícil de lo que parece.

Pero al final la mujer no puede hacer nada porque en eso llega Alan (el de las botas drag) y se pone a platicar con ella haciendole perder su oportunidad.

Más tarde nos encontramos a Gina paseando por la playa junto a Jamie. Los dos están hablando del servicio especial de limpieza que tuvieron que realizar. Jamie le dice a Gina que lo limpió todo a conciencia pero que se quedó con la agenda porque era una prueba contra su padre pues su nombre estaba por todas partes.

Gina no entiende como demonios se metió en este enredo, y está nefasta porque su padres predijo que ella lo ayudaría y al final ha resultado ser cierto.

Me dijo que yo iba a ayudarlo, me lo dijo y tenía razón. A lo mejor me conoce mejor de lo que me conozco yo misma.

Y lo peor es que la pobre se siente muy mal porque encima también metió a Jamie en el entierro y ahora están los dos con el agua hasta el cuello.

Volviendo a la muertita, Jamie le dice que su padre no estaba viendo a diferentes prostis, que más bien era solo a esa mujer y que era como por citas, en fin que era una mujer muy exclusivilla. Y como ve a Gina llorando y muy afectada procede a contarle que el alias de la mujer era «Candy Kane» jeje que en ingles suena igual a Candy Cane que son dulces que solemos comernos en navidad con forma de bastoncito. Claro que Candy Cane también es una práctica sexual que incluye sangre, semen y…prefiero quedarme con lo del bastoncito… En fin que los dos terminan muertos de la risa a pesar del mal rato que están pasando.

En otra parte de la playa Sami está tranquilita leyendo cuando se aparece un hombre hasta ahora desconocido para nosotras y se le presenta diciéndole que le encanta el libro que está leyendo. Luego procede a sacarle conversación sobre Africa y a decirle que es un hombre de aventura y acción.

Sami no cae en sus enredos y rápidamente le deja caer que tiene novio al petardusqui (que no sé porque tiene problema pintado en toda la frente) y al final el tipo termina por irse.

En nuestra última escena vemos a Gina sola en la playa sintiéndose totalmente sola y abandonada, cuando de repente aparecen unas hermosas piernas enfundadas en un vestido.

Gina: Estas aquí…

Ani: Por supuesto que lo estoy.

Entonces Ani se sienta a su lado y Gina toma su mano entre las suyas y yo siento ese extraño clic eléctrico que recorría mi cuerpo cuando Otalia en sus mejores momentos. Que momentazo señoras, miren que sigo siendo un poco más Lara y Ani pero no se puede negar que el amor, la complicidad y la química que emiten estas dos cuando están juntas es increíble.

Y así con nuestras dos chicas sentadas en la playa compartiendo un pequeño momento de intimidad se termina nuestro episodio. ¡Quiero saber que pasa ya! Ojalá que la espera no sea muy larga. La canción de esta semana se llama «Through this fire y es de Jen Woodhouse que si las neuronas no me fallan también estuvo en el soundtrack de la primera temporada con una canción que se llamaba Gravity. La canción ha sido estrenada en Venice así que me temo que no podemos comprarla todavía. ¡Nos vemos en el próximo episodio!