Pretty Little Liars resumen de episodio 4×12

Escrito por: Desiderata

Soy incierta de nacimiento… casi invisible por tímidez, que no afloja ni con el paso de los años. Tengo treintaytantos y escribo a orillas del Tormes. Me gusta encontrar la felicidad en las cosas pequeñas de la vida, cosas que hace que la vida valga la pena. Tengo algunos defectos como lo de ser lectora, serie-adicta y buscadora compulsiva Y cómo diría Juan Gelman “Escribo en el olvido / en cada fuego de la noche / cada rostro de ti.”

El último capítulo antes del parón de mitad de temporada de Pretty Little Liars estoy segura de que va a resolver casi todos los misterios y preguntas que tenemos ¿A que sí? ¿Verdad? ¿No? Tengo mis dudas. En el anterior capítulo nos quedamos con el nuevo testigo que presenció que la señora Marin se fue del lago antes de los disparos. Y gracias a este apuesto mozo la hermosa señora Marin queda libre de todos los cargos. ¿Qué precio les hará pagar A- a las chicas a cambio de esta novedad? Porque está claro que A- quiere jugar. El juego empieza con el envío para las chicas de esas bolas mágicas que te adivinan el futuro. El mensaje es claro: si la señora Marin sale libre tendrán noticias de A-.

La guerra mundial A- ha comenzado y Paige piensa esperar el combate invitando a pasar las noches en su casa a Emily. Al menos las que sean posibles. Pero el juego está en marcha y A- les envía un pequeño ataúd infantil con una muñeca dentro que representa a Mona: “Hanna gana así que Mona pierde. Encontradla antes que la policía o pensarán que vosotras la matasteis”. Pero Mona ya no está en Radley así que la búsqueda puede complicarse un poco. Así que las chicas se separan para ampliar la búsqueda. Spencer va a casa de Wren para hablar con él. El doctorcito no está en casa pero quién sí se esconde allí es Shana. ¡Ah! Y nos enteramos de que Shana va a enviarle a Wren un paquete ¡pero a la dirección de Melissa en Londres! Emily y Paige van al instituto para ver si alguien sabe algo pero sólo encuentran a una estirada que se empeña en presumir de su buen nivel de francés.

El tercer paquete que les hace llegar A- hace pensar a Spencer que lo que A- está montando es un espectáculo de magia. Todo por la caja con truco que les hace llegar: “Mirad como hago desaparecer a una chica. Besos A-”. ¿Y dónde va a haber un espectáculo de magia? En Ravenswood, sí, queridas. El pueblo rarito con gente rarita es el próximo destino de nuestras chicas para intentar evitar que le pase algo a Mona. Lo que no estaba en sus planes es que mientras el mago usa a Aria de voluntaria la que desaparece es Emily. Encerrada en un ataúd que se acerca peligrosamente a una sierra. El mismo aserradero dónde corre a esconderse la chica del abrigo rojo. Una o dos chicas con abrigo rojo. Al menos una de ellas para la sierra.

Las chicas intentan perseguir a las de los abrigos rojos mientras Emily intenta no mearse en los pantalones del miedo. Mientras Hanna ayuda a Emily a salir del ataúd Aria lucha valientemente contra Cece y Spencer sigue a la otra moza con abrigo rojo (que debe ser tendencia en Raveswood). Hasta que Cece pierde una manga del abrigo y se da un topetazo contra el suelo. Pero Cece no está muerta y consigue huir sigilosamente. Muy sigilosamente. Tan sigilosamente como solo es posible en esta serie. Spencer quiere enseñarles algo a las chicas. Cuando ha seguido a la otra fan de los abrigos rojos (y para mí que eso son gabardinas…).

Spencer está convencida de que ella ha seguido a Ali y que se lo ha puesto fácil para que descubriera algo. Lo que ha descubierto Spencer es la guarida de A-. Con todo muy bien decorado en el sentido más espeluznante, fotos de Alison, cronologías de cada una de ellas y todos sus secretos. Resulta que se confirma que A- lo monitoriza todo, sigue los pasos de la policía, las calles de Rosewood y más. Hay muchos más. Por ejemplo los movimientos bancarios de A- que parece que creo una corporación y que tiene en nómina a Cece o un armario lleno de trajes de chaqueta de hombre. Si Cece no es A- ¿entonces quién es A-?

Mientras Toby ha seguido a Shana hasta un pequeño hotelito donde Mona tricota plácidamente en el porche. Una cosa te voy a decir Mona, en ese porche hay poca luz, eso no es bueno para la vista. Y agarra un poco más firmemente las agujas que si el punto queda muy flojo queda feo. Sabía yo que en este capítulo iban a plantearse más preguntas que otra cosa. Las chicas van atando cabos con lo que ven en la guarida de A-. Que no sólo las ha vigilado a ellas si no también a Alison, que A- es un chico y que Alison sigue viva. ¿Y a quién enterraron y dieron sepultura?

Resulta que hay una fiesta esa misma noche en Ravenswood y A- cree que Alison estará allí. Las chicas quieren encontrar a Ali antes que el mozo de los pantalones surferos. De camino a la fiesta se encuentran con la siempre vivaracha y simpática señora Grunwald. Esta señora no da miedo para nada y nos cuenta que desde aquel verano ha estado intentando proteger a Alison de todo mal. La buena señora les cuenta a las chicas que tiene el don de la intuición y que estaba usándolo para intentar descubrir quién la amenaza. No puedo con esta serie, de verdad. ¿El don de la intuición? Pero hay más: con su intuición supo que algo pasaba la noche que desapareció y fue en su ayuda. Cuando consiguió desenterrar a Alison intentó llevarla al hospital pero en un descuido Alison se había ido de su coche.

La conclusión de la Grunwald es que Alison huyó porque no podía confiar en nadie. Grunwald les pide que se vayan porque cree que A- está usándolas para llegar hasta Alison y les advierte que él está en Ravenswood. A pesar de todas estas advertencias las chicas van a colarse en esa fiesta. Mientras A- también se prepara para esta fiesta. Bueno, Ezra Fitz se prepara para la fiesta. ¡Porque A- es Ezra! Quedan muchas preguntas para la vuelta de la cuarta temporada. ¡Y estaré aquí para contaros todo!