Lucía vivía en Mar de Plata (ARG), tenía 16 años cuando fue drogada y violada con tal brutalidad que su caso conmocionó y enardeció a la sociedad. Abusaron de ella hasta causarle la muerte, lavaron su cuerpo para intentar desaparecer la evidencia del crimen y la llevaron al médico argumentando una “sobredosis”.
Movidas por la indignación al menos 200 mujeres se manifestaron para exigir justicia para Lucía, justicia para todas las mujeres violentadas y llamaron a un Paro Nacional que pronto se replicó en América Latina.
Muchas de ustedes dirán que es un hecho lamentable, y sí, hay más hechos mundiales que lamentar, incluso mencionarán que hay hombres quienes mueren a diario también; sin embargo ella no es un caso aislado, Lucía es solo una de doscientos feminicidios al año en Argentina.
Ahora, mi México lindo y querido no se queda atrás. El Estado de México se está convirtiendo en la nueva Ciudad Juárez, de enero a mayo de 2016 se tuvo un registro de 39 muertes por motivos de género y 100 homicidios de mujeres con dolo. Hablemos de Paola, chica trans que ejercía el trabajo sexual y fue asesinada por un ex militar; Alessa Flores, activista y trabajadora sexual, fue encontrada muerta en un hotel, y ambos casos están impunes. Internamente se siente una gran rabia por cómo (mal) funcionan los sistemas penales en México.
No es por chingar (me perdone Rogue por la palabra), pero nos están matando, casi 50% de las mujeres ha sido violentado por al menos una de sus parejas y según el INEGI (2001) 63 de cada 100 mujeres (de 15 años en adelante) han sufrido violencia de su pareja o por algún familiar.
Miércoles negro
Argentina hizo un llamado imparable, somos muchas quienes hemos sufrido de violencia y México, Guatemala, Bolivia, Chile, Paraguay y Uruguay nos unimos en el Paro Latinoaméricano de mujeres. Es necesario visibilizar esta matanza que muchas y muchos ignoran, no es solo es una lucha feminista, es cuestión de humanidad ¿Quién viola y mata a una mujer por placer? Una hombre impulsado por el odio y sin el mínimo respeto por la vida, a la cual las mujeres tenemos derecho.
En Argentina se abandonaron las actividades desde la 1 pm y en México lugares como el Ángel de la Independencia y el Claustro de Sor Juana fueron tomados por mujeres vestidas de negro, pancartas y consignas; #FeminicidiosEmergenciaNacional, #NiUnaMenos y #VivasNosQueremos.
Esto fue una protesta para poner bien claro nuestro hartazgo. Nosotras paramos y debemos parar todas, no hemos podido ser libres, ni para amar ni para vivir. Ya estamos hartas del acoso, de la humillación y el machismo; el mismo machismo protagonista de los feminicidios.
Es horrible levantarse cada día y leer las malas noticias, y es aún peor cuando piensas que la próxima víctima puedes ser tú. Ya basta de vivir con miedo, estamos muy cansadas de caminar cuidándonos la espalda, las violencias machistas deben parar. Hoy estamos fuertes y unidas para luchar y alzar la voz.
¡Si tocan a una, respondemos todas! ¡Ni una menos!
No solo 200, fueron miles, en la mayoría de las ciudades mas importantes de la Argentina. Yo fui a la de La Plata, pcia de Buenos Aires, y eramos mas 10.000 personas, abajo de la lluvia.
Qué bueno que salga este artículo, pero, como dice Pilar Desperés, las marchas en Argentina fueron masivas. Las fotos de tantas personas y sus paraguas (llovió a lo largo de todo el día) fueron muy representativas del dolor en medio de tanta indignación por el caso de Lucía (crimen perpetrado de manera inhumana) y tantas otras mujeres.
En Chile fue una cosa masiva, miles de personas marchando hacia la Moneda (palacio presidencial) con indignación. Y todo eso considerando que fue casi de la nada el llamado a marchar.