Imagina estar de regreso en esa relación que te dejó el corazón partido en pedacitos y recuerda esa discusión, la peor del mundo, la más tonta, pero a su vez, la más significativa ¿Pudiste? Escribir estos blogs tiene sus ventajas, no recordarles lo peor de su vida, sino la realidad en la que se encuentran y darnos cinco minutos para reflexionar.

Es muy común observar o haber vivido en la pareja una situación de desequilibrio, hablamos sobre quién lleva las dichosas “riendas” y quién permanece sumisa, esto no solo aplica en los roles sexuales como activa/pasiva o por una situación machista de quién es “el hombre”, esto es parte de una manipulación y relación enfermiza la cual tiende a deteriorar a cada una de sus partícipes.

Un noviazgo también tiene fecha de caducidad y sobre todo si se deteriora, estas son algunas etapas que podrás identificar si estás en este problema amoroso.

Cuando pasa el “estira y afloja”

Mi madre solía ser una gran negociadora y me enseñó que mientras más des más pierdes. Dentro de una pareja al cierto tiempo puede pasar una lucha por saber quién hace qué por ganarse qué, digamos, se condiciona el amor, el afecto e incluso el contacto físico.

“Te amo en tanto hagas lo que deseo y te desprecio en tanto hagas lo que tu deseas”, si una de las dos partes llega a hacer esto ya tendrá a la otra comiendo de su mano, como ya mencionaba, es manipulación pura.

Crear un objeto, no un ser humano

Duele mucho cuando esto pasa. Hacer de la novia un artículo más de tu vida y/o “poseerla” es intentar mantener el control sobre ella, su hábitos, amigos, familia, su vida; ya sea que se viva el trago amargo o solo se sea testigo, es una situación terrible. No salgas con… No me gusta que veas a tu prima son limitaciones de la libertad.

El conocimiento es poder

No solo es una frase trillada, también es cierta. El conocer a tu pareja, saber sus manías, sus gustos, te da un acercamiento único y es en ese momento donde te empoderas sobre el otro.

Por ejemplo “sé cómo eres de miedosa, no te atreverías a viajar tú sola”, quien dice la frase ya está limitando las capacidades, deseos o comportamientos de su chica poniéndolos en duda, le agrega desconfianza y disminuye su autoestima. Presumir de la experiencia en ciertas cosas también es una forma de reprimir a la pareja.

Bien sabemos que la violencia en las relaciones no solo es de forma física y imponer tu voluntad, sin golpes, también es violencia. En caso de ser tú la agresora aún puedes detenerte a pensar en cómo pierdes a tu novia y el daño que le haces; por lo contrario, si estás viviendo de forma sumisa siempre puedes despertar, hablarlo y si no se llega a un acuerdo equitativo siempre habrá oportunidades de comenzar una vida nueva, sola, con alguien más o llena de amigos.

Es muy común llegar y hacer la broma de “ser mandilona” pero si esto se está convirtiendo en algo no-saludable, por favor corre… El amor no es como nos lo pintan, así las cosas ¿Qué opinan sobre ejercer el poder en las relaciones lesbicanarias?