Otro capítulo más de estás pequeñas mentirosas, señoritas. Si recuerdan nos quedamos en el último capítulo viendo el vídeo que le había llegado a Spencer sobre los últimos momentos de Hanna, la muertita (en esta serie, por suerte, solo hay una muertita y por ahora no necesitaremos numerar a los muertitos como nos pasa con Rizzoli & Isles). Así que encontramos a nuestras chicas en shock después de ver cómo Hanna se encontró con Ian en el bosque.

Y aquí queridas mías empieza la paranoia de nuevo con A. y quién puede ser y el porqué de hacerles llegar el vídeo. Pero aparece Ian y la paranoia aumenta por si es él quién tuvo algo que ver algo con la muerte de Alison. Así que nuestras chicas hermosas deciden que es el momento de darle la grabación a la policía.

De modo que al día siguiente tenemos a tres de nuestras mentirosas decorando el instituto para lo que parece un baile. Y aparece Spencer preguntándole si sigue en pie el plan de llevar la grabación a la policía porque ella cree que es una trampa de A. pero y nuestra Emily la convencen de que es lo mejor. Mientras Hanna intenta solucionar algunos problemas en la organización del baile Aria descubre que su mamá (¿les he dicho ya que adoro a Holly Marie Combs?) ha decidido presentarle a la que fue su canguro cuando era niña, que está de visita en la ciudad, a Ezra. Puesto que este está soltero y es muy guapo ¡ay las mamás que hacen de celestinas!

Mientras nuestra Emily ha empezado a sufrir ¿deberemos acuñar el termino #sufrocomoEmily? ¿Igual que ya acuñamos el de #sufrocomoMariana? (nuestra Rogue es el que suele usar) ¿o el de #sufrocomoAnaRivas? Señoras, esto es Lesbicanarias y sin una dosis de sufrimiento no merecería la pena. Emily intenta llamar por teléfono para hablar con Maya pero sin éxito.

Parece que en el campamento han decidido que nada de llamadas, ni mensajes ni mails ¡Ays! Pero la pequeña Hanna tiene una idea para ayudar a Emily: el chico nuevo del lugar mejora los móviles con múltiples aplicaciones, así que podrá llamar a su amor ¿me lo parece a mí o estas jovencitas aprendieron mucho de Alison?

Cuando las chicas se juntan a la hora de la comida para ir a la policía descubren que a Spencer le ha desaparecido el portátil… ¿y quién ha podido quitárselo? ¿quizá el entrenador que es Ian?

Nuestra Emily se encuentra al tipo del móvil al salir de la tintorería y le pregunta si su móvil ya está listo… pero parece que el tipo quiere un poco más de cash para acelerar el proceso. Emily le cuenta que lo necesita para hablar con una amiga esa misma noche y Caleb le pregunta si está en rehabilitación ¡qué linda Emily intentando explicarse! “no es una porrera”, le dice.

Mientras Hanna intenta encontrar un trabajo (parece que siguen con problemitas de dinero ella y su madre) recibe un sms de A. por si quiere evitar que su mamá vaya a la cárcel. Así que la única preocupada en la desaparición del portátil es Spencer que se cruza con su cuñado Ian en la cocina. Spenser le pregunta sutilmente si ha visto el portátil pero Ian se hace el escurridizo y le dice que no. Resulta que su cuñado también irá al baile esa noche.

Esa noche ya en el baile nuestra Emily (chicas, sean generosas, es un poco de todas, no empiecen con las peleas tipo “yo la vi primero”) ve a Ian en su despacho guardando bajo llave su mugroso maletín (está un poco mugroso, no me digan). Y las cuatro están de acuerdo que en el mugroso bolso es dónde está el portátil. Así que como son unas chicas dispuestas, porque hay que reconocerles que después de una amiga muertita, otra atropellada y todas amenazadas por A. son unas chicas dispuestas y lanzadas, deciden intentar conseguir el mugroso maletín.

Quizá alguna se pregunte porque todos van con un número en la espalda como en un maratón ¡pues esto es un maratón de baile o baile-ton! Para conseguir dinero para un viaje.

Nuestra Emily se encuentra con el tipo de los móviles y por fin consigue el suyo. Y mientras Hanna tiene su primer “trabajo” de A. que consiste en tener un baile con Lucas, y Aria y Spencer están dispuestas a abrir el mugroso maletín, Emily sale para llamar a Maya. Y aquí hay que volver a poner el modo #sufrocomoEmily en modo ON puesto que Emily siente que Maya quizá haya cambiado, puesto que nota como si “no estuviera” y a pesar de que tras la llamada Spencer intenta justificar la situación de Maya sentimos que Emily está decepcionada con la llamada y con la actitud de Maya.

Nuestras chicas están centradas en sus objetivos, recordemos: Hanna y su baile para romper el corazón de Lucas; Aria consiguiendo las llaves de Ian y Spencer consiguiendo el mugroso maletín. La noche avanza y mientras Aria desespera con lo bien que se lleva Simone (la niñera convertida en escritora) con Ezra quien también desespera es Sean viendo bailar a Hanna con Lucas. Y llegados a este punto tengo algo que decirle a Spencer (y no, no es que le queda mejor el pelo suelto que esas trencitas que se empeña en ponerse señorita Spencer, eso lo dejaremos para un momento más distendido). Querida Spencer, si vas a entrar al despacho de un profesor y a abrir un cajón para “chequear” que no está tu portátil ¿no deberías hacerlo a oscuras y con una linterna? Vale que no vayas de negro y con la cara tapada ¡pero apaga las luces! Porque claro, el nuevo chico malo del instituto encuentra a Spencer en estos menesteres (¿por qué siempre hay un chico malo en las escuelas? No, no me respondan porque entonces tendría que preguntarles que por qué hay una chica mala en las escuelas). Por cierto cuanta sabiduría el chico malote eh? Con todo eso de “las chicas ricas roban, las guapas mienten, las listas se hacen las tontas y las tontas se pasan los días intentando ser todo lo anterior” ¡Cuanta sabiduría en un solo jovencito! Pero chicas, cuidado con las generalizaciones, no siempre son válidas.

Así que al baile se unen los papás de Aria que aún están intentando saber si equivocan las cosas o no, o más bien quién equivoca las cosas y quién no ¿les dije ya que adoro a Holly Marie Combs? ¡Lo sé! ¡Lo sé! Me repito, pero sean benévolas conmigo, soy débil frente a la belleza 😛

Y mientras nuestra Emily ha decidido que quiere ahogar sus penas en alcohol (suele ser una mala idea, pequeña, una mala idea) Aria y Spencer siguen dándole vueltas a no poder conseguir el mugroso bolso de Ian mientras nuestra Emily ha decidido que vaciar ella sola la petaca de Hanna es la mejor de las ideas ¿querrá juntarse con Maya en el campamento represor por las malas?

Hasta que la propia Hanna descubre que no le ha dejado ni una gota. Ambas se ponen ha hablar de sus pequeñas miserias y de cómo Alison jugó con nuestra Emily y con sus sentimientos, porque Emily cree que es lo que Hanna está haciendo con Lucas. Así que Emily se comporta cruelmente con Hanna diciéndole un par de maldades ¿habla el alcohol? ¿o el corazón herido de Emily?

Pero la vida puede ser muy cruel, en este caso es A. quien es cruel y le ofrece vía sms 1000 dólares por un último baile con Lucas. ¡Ay! Pero esto a Sean no le va a gustar nada, pequeñas, de hecho no le gusta nada de nada y rompe con ella. Ese último baile tiene un precio muy alto me temo.

Emily anda por ahí casi perdiendo la verticalidad ¿pero qué tenía esa petaca? ¡qué alguien me lo diga, por las diosas! Está ofendidísima con que Ian esté delante de sus narices mientras Toby está en casa con un localizador ¿por qué sale Toby en este momento? Y ahí que vamos, señoras, porque Emily se lanza cual jovencita alcoholizada ha decirle cuatro cosas bien dichas a Ian, sin pensar en las consecuencias, ni en que está rodeada de decenas de personas.

Spencer sale del paso como puede intentando llevar la atención de Ian hacia que Emily se refería a que ellos dos se besaron el verano pasado. Les confieso que Ian me da miedo, ahí amenazando a Spencer… Las chicas deciden que Emily y Hanna se quedaran a dormir en casa de Spencer para evitar que la mamá de Emily la vea en esas condiciones.

Ya en casa de Spencer nuestra Emily intenta llamar a Maya pero la buena de Hanna se lo impide “Las amigas no dejan a las amigas llamar borrachas. Me lo agradecerás mañana, si puedes recordar mi nombre” ¿no me dirán que en cierta manera no tiene razón? Y Emily se disculpa por las cosas que le dijo en el baile, Hanna acepta las disculpas y mientras explica cómo se siente Emily se ha dormido. El momento de arroparla en la cama es tan tierno… Son unas pequeñas mentirosas tiernas ¿o solo me lo parece a mi?

Spencer y Hanna encuentran el portátil de Spencer en una mesita, suponen que Ian lo ha dejado ahí antes de irse al baile. Por supuesto no está el vídeo de Alison, pero encuentran un mensaje de A. con una foto “Vigilad vuestras espaldas. Yo no lo hice. A.” En la foto se ve una sombra y parece que Spencer reconoce la silueta aunque se lo niega a Hanna… De nuevo nos quedamos con la intriga hasta el próximo capítulo de saber qué es lo que sucede y por qué Spencer niega reconocer la sombra.

¿Qué sucedera con Maya y Emily? ¿Cómo avanzará su relación en los próximos capítulos? ¿Ustedes qué opinan? ¿Alguien sospecha ya quién es A.? ¿Y quién puede ser el asesino? ¿Quizá el mayordomo? Ups! En esta serie no hay mayordomo.

Compartir en Pinterest Compartir en WhatsApp Compartir en Telegram